El origen de esta bebida se encuentra en el año 1959, cuando un grupo de viajeros vascos retaron al propietario del Café Madrid en Valencia, Constante Gil, a crear un nuevo cóctel, cansados ya del que pedían siempre, el Agua de Bilbao. El cóctel fue todo un éxito pero no fue hasta la década de los 70 cuando comenzó a hacerse popular entre las noches valencianas.
Hoy en día es una bebida muy popular que suele servirse en jarras para servir en copas, es decir, está pensada para grupos de gente, y que además, ha tenido numerosas variantes y versiones desde entonces, como el Agua de Malvarrosa, el Agua de Sevilla, el Agua de Murcia o la Caipiragua, por nombrar algunas.
Como consejos para su preparación, podemos decir que lo mejor es utilizar naranjas valencianas de temporada y no utilizar licor de naranja (tipo Cointreau o Curaçao) para no eliminar el aroma de la naranja natural. Lo ideal es prepararlo con antelación para servirlo bien frío.
Ingredientes:
Medio litro de zumo de naranja.
Medio litro de cava semiseco o brut.
60 ml. de ginebra.
60 ml. de vodka.
Azúcar y naranjas
Elaboración:
Verter en una jarra el medio litro de zumo de naranja recién exprimido y añadir la ginebra y el vodka. Añadir 3 cucharadas de azúcar (alguna más si se desea más dulce) y remover hasta disolver el azúcar. Agregar el cava y remover lentamente.
Poner hielo en la jarra y unas rodajas de naranja y servir en copas de cava abiertas.
[Fuente: la receta es de Toni Castillo de ginebras.net]
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